El zumo de granada, el jugo de la ‘superfruta’

Hay frutas completas y luego están las superfrutas, como la granada. Solo le falta el traje de ‘Superfruit’ para plegarnos ante ella y reverenciarla. Y méritos no le faltan. Porque esta fruta, originaria de Asia y proveniente del granado, alberga múltiples beneficios que se mantienen en su formato de zumo. Pero, ¿qué la hace tan especial? Desde Zumos Ecológicos hace tiempo que apostamos por el zumo de granada, pero ahora queremos compartir sus efectos positivos.

 

Según varios estudios, esta fruta contiene un alto valor en antioxidantes, el triple que otro alimentos que llevan esta consideración como puede ser el té verde o los arándanos. Pero no es lo único que aporta el zumo de granada, ya que su consumo frecuente favorece una mejor circulación de la sangre.

Para hacernos a la idea de sus ‘superpoderes’ qué mejor manera que listar sus propiedades, entre las que también se encuentran:

  • El don de ser anticancerígeno: No hace milagros, pero es un complemento recomendado para compaginar con los tratamientos convencionales. De hecho, en Zumos Ecológicos hemos recibido peticiones en este sentido. En el caso de los hombres se indica para retrasar el avance del cáncer de próstata.
  • Elimina toxinas: Por ello, es bueno para depurar hígado, la propia sangre y favorecer un buen funcionamiento renal.
  • Buen desestresante: Por una parte, aumenta las sensaciones positivas y la vitalidad, pero también tiene un efecto antiestrés, reduciendo la ansiedad.
  • Protector del corazón: Reduce los niveles de colesterol; además, ayuda en la prevención de ciertas dolencias como la hipertensión, baja el riesgo de sufrir arterioesclerosis; y favorece la correcta circulación.
  • Aliado del sistema neurológico: En embarazadas actúa como protector del feto para evitar algunas lesiones en el parto. Esos beneficios neuroprotectores hacen que reduzca daños cerebrales o desarreglos neuronales como el alzhéimer.
  • Equilibrio del peso: El jugo de granada es también un buen aliado de la báscula, ya que para quienes hacen dieta les ofrece sus propiedades diuréticas y al mismo tiempo la capacidad de saciar el apetito.
  • Refuerza el sistema inmunitario: Es especialmente recomendable su consumo en esta época otoñal, ya que incrementa las defensas lo que ayuda a superar resfriados, posibles infecciones o la gripe.
  • Buen amigo del sistema hormonal y reproductor: Entre sus casi infinitas propiedades también están la de mejorar la cantidad de espermatozoides o disminuir los síntomas de la menopausia, por ejemplo.

 

Zumo de Granada: rica en minerales, vitaminas y fibra

 

En el aspecto nutritivo la granada cumple con las expectativas de una ‘superfruta’ ya que aporta minerales, como calcio, hierro y potasio, así como vitaminas (A, C, E y B5) y además contiene bastante fibra.

No es de extrañar, por tanto, que con este amplio currículum de beneficios, esta fruta fuera del gusto de tan variadas civilizaciones, como los egipcios, los griegos y que hoy tenga tras de sí la concepción popular de múltiples ‘rituales’ que rozan lo místico, como en Java o China donde se le otorgan poderes reproductores.

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¿Cómo puede afectarte la basura electrónica sin control?

En una sociedad que cada vez tiene más concienciación sobre la importancia del medio ambiente, la alimentación saludable y los beneficios de la agricultura ecológica, como la  que da lugar a nuestros Zumos Ecológicos, en esa misma sociedad hay un volumen preocupante de materiales nocivos. En este caso se trata de la basura electrónica, es decir, el conjunto de dispositivos eléctricos o electrónicos que se desechan.

Los datos son elocuentes: cada año se generan en España alrededor de un millón de toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE). De esa cifra, una notable parte escapa al control de las autoridades y empresas que los gestionan. En concreto, se estima que cerca del 60% de la basura electrónica producida en suelo español termina en lugares desconocidos. Un porcentaje preocupante que convierte a España en uno de los países europeos con más chatarra de tipo electrónico no controlada, tan solo por detrás de Chipre y Rumanía.

Pero, ¿de qué forma podrían a afectar a nuestras vidas? Estos aparatos contienen componentes que pueden llegar a ser dañinos para el medio ambiente y también, cómo no, para nuestra salud. Entre ellos estarían, por ejemplo, el plomo, cadmio, berilio o mercurio.

Más en concreto, como reconocen los expertos, el cromo, que habitualmente se usa para las cubiertas de metal, resulta cancerígeno; el cadmio, que con frecuencia se encuentra en baterías recargables, produce daños en huesos y riñones; mientras que el mercurio, fundamental para el sistema de iluminación de monitores, afecta de forma nociva al sistema nervioso y al cerebro.

 

¿Cómo frenar o actuar contra esta contaminación?

El control de este tipo de residuos electrónicos parece la forma más adecuada de enfrentarse a este problema propio del siglo XXI. Esto pasa por un mayor sistema de registro y la adecuación de lugares donde desechar esta basura, ya que una destacada parte se exporta ilegalmente a países en desarrollo o se elimina en entornos inseguros.

Pero más allá de ese control, el reciclaje de estos desechos se alza como la principal solución para esta situación. Y en este sentido, las Administraciones tienen en su mano el modo de gestión, pero todos nosotros, como consumidores de materiales eléctricos tenemos la posibilidad y la responsabilidad de actuar entregando estos desechos en los ‘puntos limpios’ de nuestras ciudades.

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